MODA SOSTENIBLE EN JUAN XXIII

La producción textil es la segunda industria más contaminante del planeta, solo por detrás de la petrolera. ¿Sabías que se consumen 7500 litros de agua para producir un pantalón vaquero? ¿Y que cada segundo se entierra o quema una cantidad de ropa equivalente a un camión de basura? La industria de la moda produce más emisiones de carbono que todos los vuelos y envíos marítimos internacionales juntos, con las consecuencias que ello tiene en el cambio climático y el calentamiento global. Además las nuevas empresas de “moda ultra rápida” como Shein o BooHoo han fomentado la compra compulsiva de un número tan desproporcionado de prendas, que apenas podrán ser llevadas una o dos veces en toda su vida.

Los jóvenes de 5º y 6º de primaria del CEIP Juan XXIII de Huesca han tenido la oportunidad de reflexionar sobre estos problemas y sus posibles soluciones en el I Congreso Medioambiental, organizado por las profesoras del colegio el pasado 13 de diciembre. Ellas mismas se pusieron en contacto con el Dpto. de Economía del IES Ramón y Cajal para invitar a nuestro alumnado de 1º bachillerato a ofrecer una ponencia sobre la moda sostenible, un tema que hemos estudiado a fondo durante el primer trimestre. En esta ocasión se ofrecieron cinco estudiantes -Maimouna Diallo, Ángela Martínez, Lucía  Mompradé, Miguel Monge y Andreea Muntean- para acudir al colegio y descubrir a los escolares cómo transformar su armario en un aliado de la sostenibilidad. 

Además de nuestros representantes, el colegio ha contado con un amplio plantel de expertos en campos diversos: ‘Emergencia climática’ con Javier Martínez, profesor de la Universidad de Zaragoza en el área de Ciencias Experimentales; ‘Agricultura ecológica y circuitos cortos de comercialización’ con Diana Calvo, ingeniera técnica agrícola e impulsora del mercado agroecológico de Huesca; ‘Podemos frenar el cambio climático: Obtención de energía sin emitir CO2’ con Isabel Suelves y Carmen Mayoral, investigadoras del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Instituto de Carboquímica de Zaragoza; o ‘La contaminación silenciosa’ a cargo de la Asociación Loporzano Vivo.

Esta experiencia colaborativa entre colegio e instituto ha sido muy enriquecedora para todas las partes y confiamos en que sirva como semilla inicial para más proyectos futuros.