El premio ha consistido en un sabroso almuerzo saludable y solidario, seguido de un taller informativo sobre el etiquetado de alimentos. Los alimentos del almuerzo sorpresa, como no podía ser de otra manera, han sido seleccionados por ser de temporada, de proximidad y sin envoltorios, comprados todos en establecimientos comerciales familiares de nuestro barrio para potenciar la economía local. Entre otros manjares hemos degustado tortilla de patata con huevos camperos, bizcocho casero tradicional con chocolate de comercio justo, nueces y almendras, fresas, cerezas, melón, manzanas, plátanos, mosto y zumos variados.
Tras la degustación hemos dado paso al taller ‘Conoce los alimentos a través del etiquetado’ impartido por la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón dentro de su Programa de Educación del Consumidor 2022-2023. Allí hemos aprendido a interpretar los datos nutricionales de las etiquetas, los ingredientes -que siempre se detallan en orden de mayor a menor porcentaje-, los mensajes comerciales a menudo exagerados que tratan de convencernos de las supuestas bondades del producto, las artimañas de la industria alimentaria para lavar su imagen a través de códigos como el Nutriscore, o los sellos de certificación de calidad como los de agricultura ecológica o los de denominación de origen.
Desde septiembre la campaña “Recreos Residuos Cero” ha informado sobre los tipos de almuerzos generan menos residuos y los alimentos y bebidas que consiguen mejorar la salud personal, la sociedad, la economía y la naturaleza. A lo largo de estos meses hemos realizado acciones divulgativas en las reuniones con familias, en las aulas mediante cartelería de promoción de la fruta fresca, en las tutorías de 1º ESO y 3º ESO con el asesoramiento de parejas voluntarias de Economía de 1ºBACH., y sobre todo, a través de un registro visual y cálculo estadístico de los residuos generados en cada aula desde octubre hasta marzo. Además, hemos involucrado a diferentes estudiantes para grabar un vídeo colaborativo en clave de humor que luego ha sido compartido en las redes sociales del instituto.
El balance final del proyecto demuestra que el trabajo ha dado sus frutos, aunque todavía nos queda un buen camino por recorrer. Nuestro empeño continuará el próximo curso con la ilusión de alcanzar una alimentación más saludable y sostenible con la naturaleza, y confiamos en que lograremos por fin unos ‘Recreos Residuos Cero’. ¡Hasta pronto!
PINCHA AQUÍ PARA VER LA PRESENTACIÓN DE RESULTADOS